CUBA

Cuba, la isla más grande del Caribe, presenta un índice de desarrollo humano aceptable. No obstante, al país le afecta el embargo estadunidense y su fuerte dependencia del exterior, en especial a nivel energético y alimentario.
La AFD, presente desde 2016 en la Isla, apoya al Estado cubano en sectores clave: desarrollo rural, agua y saneamiento, energía, transporte y salud.

FOMENTAR EL DESARROLLO RURAL

Aunque cerca del 20 por ciento de la población activa trabaja en el sector agrícola, éste apenas representa el 4 por ciento del PIB. La agricultura cubana es vulnerable a los fenómenos climáticos extremos (ciclones, El Niño, La Niña) y al alza de los precios internacionales de alimentos y combustible. De manera general, en las últimas décadas, los resultados del sector se han desplomado debido a las dificultades para importar insumos agrícolas y equipamientos.

Consecuencia: el país importa entre 70 y 80 por ciento de los alimentos que consume. La población rural, y en especial los jóvenes, abandona el campo o se va del país. Por lo tanto, es fundamental aumentar la seguridad alimentaria mediante la optimización de la productividad agrícola y la diversificación de las producciones locales.

Otro elemento clave para impulsar al sector es facilitar el acceso al crédito de las cooperativas y de los agricultores. Con la transformación del sector agropecuario, las cooperativas de productores cobran importancia. En la actualidad administran 69 por ciento de las tierras agrícolas, mientras los organismos estatales hacen lo propio con el 31 por ciento restante. Por ello, es necesario ayudar a esos pequeños productores a actualizarse tanto en términos de capacidad como de tecnología.

La AFD contribuye al incremento de la producción agrícola y a la reducción de la pobreza en el sector rural. A través del Proyecto de Desarrollo Cooperativo Ganadero de la Región Central Oriental (PRODEGAN), en cofinanciamiento con el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y con el gobierno cubano, ayudamos a cerca de 11 500 explotaciones agrícolas de los sectores bovino y lácteo a mejorar sus ingresos y apoyamos a los sectores derivados (lecherías y mataderos) para reforzar su productividad y su higiene.
Cuba es la isla más grande del Caribe, cuenta con 11.2 millones de habitantes, de los cuales 76.9 por ciento vive en áreas urbanas y 19.4 por ciento tiene más de 60 años. Según el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de las Naciones Unidas, la Isla ocupa el lugar 67 de un total de 188 países. Una clasificación que refleja la buena calidad de los servicios públicos en materia de salud y de educación, con indicadores sociales y demográficos comparables a los de países desarrollados.

Además del fuerte impacto del embargo estadunidense, Cuba tiene que superar varios problemas dentro de un contexto económico y político particular. Aún depende fuertemente de las importaciones, en especial alimenticias (entre 70 y 80 por ciento de los alimentos consumidos), y por lo tanto de sus socios históricos. Actualmente, la Isla trata de abrirse a la inversión extranjera (IED) de manera más clásica para garantizar su seguridad alimentaria, satisfacer su creciente demanda energética además de orientar su mezcla energética hacia las energías verdes y de recuperar su retraso en el desarrollo de las telecomunicaciones.

País insular situado en la trayectoria de los ciclones, también es especialmente vulnerable a los efectos del cambio climático y está muy expuesto a las catástrofes naturales, como se comprobó en 2017 con el Huracán Irma.

La AFD apoya a Cuba en su camino hacia un «crecimiento verde y solidario”, esforzándose de dialogar con base en la trayectoria de bajo carbono del país (Tarea Vida) y a partir de un plan establecido de común acuerdo con las autoridades locales. Los sectores prioritarios corresponden a las infraestructuras de agua y de saneamiento, de salud o bien de transportes, que apoyamos mediante el fomento al desarrollo rural y la opción de impulsar las energías renovables.

Presente desde octubre de 2016, cuando se inauguró oficialmente su oficina en La Habana, la AFD es el primer banco de desarrollo de un país miembro de la OCDE que interviene en Cuba.

 

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Publicado en Artículos.

Cuba, La Habana. Investigador del Centro de Investigaciones Pesqueras, doctor en Ciencias en el Uso, Manejo y Preservación de los Recursos, y maestro en Ciencias del Agua.

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