Así cambian los sueños en tiempos de crisis

https://cadenaser.com/programa/2020/03/29/a_vivir_que_son_dos_dias/1585474930_020407.html

¿Por qué se convierte un sueño en una pesadilla? / Getty Images

Sabemos todo lo que está pasando fuera pero… ¿Qué pasa dentro? ¿Qué pasa cuando cerramos los ojos y empezamos a soñar?

Por Paqui Ramos / Madrid / 29 de marzo de 2020

Los sueños son la interpretación del inconsciente sobre las cosas que pasan, sobre los estímulos que recibimos del exterior. Y estos días de confinamiento son los mismos para todos: lo que vemos en la televisión, las noticias de alarma, de miedo, de muerte… ¿Es entonces posible que nuestros sueños hayan cambiado, incluso que se hayan unificado?

El psicólogo José Ramón Ubieto nos cuenta cómo muchos de sus pacientes lo corroboran. “Están soñando con angustia, tienen pesadillas. El otro día un niño de 9 años me explicaba por Skype su sueño sobre coronavirus. Le disparaba en una caseta de feria. Es la interpretación onírica de lo que ha escuchado: el virus es malo y lo que dicen los políticos de que es una guerra y hay que luchar contra él”. Interpretamos el confinamiento, la muerte, para que el inconsciente se haga cargo de lo que está pasando.

¿Por qué se convierte un sueño en una pesadilla?: El sueño tiene una función psíquica fundamental que es permitir al sujeto dormir. Por ello el deseo, que durante el día encuentra formas de manifestarse en los lapsus, olvidos, actos fallidos, de noche se pasea en las escenas de nuestros sueños pero de manera que no sea reconocible directamente. Cuando eso no es posible nos despertamos bruscamente para así seguir desconociéndolo. Es lo que llamamos pesadillas, encuentros con nuestro real más insoportable, que ha burlado, por su intensidad, la censura onírica. Para seguir durmiendo sólo nos cabe despertar”

Dice Ubieto que el sueño es una escritura que se lee, con una sintaxis que desconocemos pero que se puede estudiar y llegar a comprender. También es posible que ahora soñemos con rutinas que antes teníamos pero que ahora hemos perdido: pasear por el campo, ir de compras, salir con amigos. Es una forma de hacer realidad nuestros deseos. Un deseo que está ligado a la falta, a la privación y la insatisfacción.

Compartir...
Publicado en Artículos.

Cuba, La Habana. Investigador del Centro de Investigaciones Pesqueras, doctor en Ciencias en el Uso, Manejo y Preservación de los Recursos, y maestro en Ciencias del Agua.

Un comentario

  1. Muy buen artículo…refleja cambios irremediables en nuestras vidas ante situaciones difíciles nunca antes vividas,es cierto ,cambios que incondicionalmente son el resultado de nuestros miedos.

    Es por eso que en estos tiempo de Covid,recurrir a técnicas de relajación para mitigar nuestro estrés se hace necesario….y así permitirnos una vez más una importante reflexión sobre nuestra humanidad.
    Gracias por tan buen artículo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *