ACUAPONÍA: ¿UNA SOLUCIÓN AL HAMBRE Y LA DESNUTRICIÓN?

By Milthon Lujan

 

Diseño tradicional del sistema acuapónico acoplado. Fuente: Flores-Aguilar et al., (2024); Sustainability.Diseño tradicional del sistema acuapónico acoplado. Fuente: Flores-Aguilar et al., (2024); Sustainability.

El mundo enfrenta un desafío apremiante: garantizar la seguridad alimentaria para una población en crecimiento y al mismo tiempo proteger los recursos de nuestro planeta. Las prácticas agrícolas convencionales están ejerciendo presión sobre nuestros ecosistemas y el actual modelo económico lineal no garantiza la producción y el consumo sostenibles de alimentos.

Pero ¿qué pasaría si existiera una manera de cultivar alimentos de manera sostenible, combatir el hambre y empoderar a las comunidades al mismo tiempo?

Afortunadamente, soluciones innovadoras como la acuaponía ofrecen un enfoque sostenible e impactante para lograr el Hambre Cero, como se describe en la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.

Un artículo publicado por científicos de la Universidad Autónoma de Querétaro y de la Universidad Veracruzana explora cómo la acuaponía, una técnica agrícola inspirada en la naturaleza, puede contribuir al Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 (ODS 2): Hambre Cero en México; sin embargo, sus hallazgos se pueden extrapolar a otras naciones.

La Oportunidad: Acuaponía

La acuaponía ofrece una solución sostenible al imitar los ecosistemas naturales y utilizar «aguas enriquecidas orgánicamente» provenientes de la piscicultura para el crecimiento de las plantas.

Esta tecnología innovadora tiene el potencial de:

  • Aumentar la producción de alimentos: La acuaponía puede producir más alimentos por unidad de área y agua en comparación con la agricultura tradicional.

  • Nutrición mejorada: El sistema puede producir pescado y verduras diversas y ricas en nutrientes.

  • Beneficios económicos: La producción local de alimentos puede crear empleos, empoderar a las comunidades y reducir la dependencia de fuentes externas de alimentos.

  • Sostenibilidad ambiental: La acuaponía conserva el agua, reduce los desechos y minimiza el impacto ambiental.

  • Empodera a las comunidades: Escalable desde pequeñas instalaciones hasta sistemas de gran escala, haciéndolo accesible a diversas partes interesadas, incluidos pequeños agricultores, mujeres y comunidades rurales.

Objetivo Hambre Cero con Acuaponía

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible describe una hoja de ruta para un futuro mejor, con el Objetivo 2: Hambre Cero en su núcleo. Este ambicioso objetivo tiene como objetivo acabar con el hambre, lograr la seguridad alimentaria, mejorar la nutrición y promover la agricultura sostenible.

Este documento destaca cómo la acuaponía puede abordar directamente las tres primeras metas del Objetivo de Desarrollo Sostenible 2 (ODS 2):

Meta 2.1: Poner fin al hambre con recompensas ricas en nutrientes

La acuaponía no se trata sólo de cultivar alimentos; se trata de cultivar alimentos nutritivos. La relación simbiótica entre peces y plantas en un sistema acuapónico crea un fertilizante natural rico en nutrientes orgánicos que nutre los cultivos. Los estudios han demostrado que las plantas acuapónicas tienen niveles más altos de vitaminas, minerales y moléculas bioactivas en comparación con los cultivos cultivados convencionalmente, lo que las hace más efectivas para combatir el hambre y la desnutrición.

Meta 2.2: Atacar la desnutrición desde la raíz

Más allá de la ingesta calórica básica, la acuaponía aborda el hambre oculta, la falta de micronutrientes esenciales que a menudo afecta a las poblaciones vulnerables. El mayor contenido de nutrientes de los cultivos acuapónicos significa que contienen un mayor aporte nutricional, proporcionando vitaminas y minerales esenciales para combatir las deficiencias y promover la salud en general.

Meta 2.3: Empoderar a los pequeños agricultores, gran impacto

La belleza de la acuaponía radica en su escalabilidad. A diferencia de la agricultura tradicional, que a menudo requiere grandes extensiones de tierra, los sistemas acuapónicos se pueden adaptar a varias escalas, desde jardines en azoteas hasta granjas comunitarias. Esto lo convierte en una opción ideal para que los pequeños agricultores, las mujeres y las comunidades rurales produzcan sus propios alimentos, garanticen su seguridad alimentaria y generen ingresos.

Liberando el potencial: acción local, impacto global

Si bien la acuaponía tiene un inmenso potencial, el apoyo local y el desarrollo de infraestructura son cruciales para su adopción generalizada. Esto incluye invertir en investigación, educación y capacitación, crear acceso a recursos y financiamiento y fomentar la colaboración entre comunidades, gobiernos e instituciones de investigación. Al fomentar un ecosistema de apoyo, podemos desbloquear el poder transformador de la acuaponía y cultivar un futuro donde el Hambre Cero ya no sea un sueño, sino una realidad.

Conclusión

La acuaponía tiene un inmenso potencial para abordar los desafíos de la seguridad alimentaria en México, y en el mundo, contribuyendo al ODS 2 y fomentando un sistema alimentario más sostenible y resiliente. Al aprovechar su potencial, México puede allanar el camino hacia un futuro donde las comunidades prosperen y nuestro planeta prospere.

¿Estás listo para ser parte de la solución? Ya sea que sea un consumidor que busca alimentos nutritivos, un agricultor que explora opciones sostenibles o un defensor de la justicia alimentaria, hay un lugar para usted en el movimiento de acuaponía.

Referencia (acceso abierto)
Flores-Aguilar, Priscila Sarai, Julieta Sánchez-Velázquez, Humberto Aguirre-Becerra, Guillermo Abraham Peña-Herrejón, Sergio Aurelio Zamora-Castro, and Genaro Martín Soto-Zarazúa. 2024. «Can Aquaponics Be Utilized to Reach Zero Hunger at a Local Level?» Sustainability 16, no. 3: 1130. https://doi.org/10.3390/su16031130

FUENTE: Acuaponía: ¿una solución al hambre y la desnutrición? (aquahoy.com)

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Publicado en Acuicultura, Artículos, Comidas Marinas, Ecología, Educación ambiental, Educación ambiental, Medio Ambiente.

Cuba, La Habana. Investigador del Centro de Investigaciones Pesqueras, doctor en Ciencias en el Uso, Manejo y Preservación de los Recursos, y maestro en Ciencias del Agua.

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